De nuevo la primavera haciendo de las suyas, tras una mañana de lluvia a raudales, que hasta truenos ha habido, se nos ha quedado una tarde de verano con el cielo azul y el mar como una esmeralda, si esto sigue así viviremos en la selva...
Animada por ese pensamiento, me he lanzado a plantar unas petunias en la terraza, como aquí solo paso temporadas no suelo tener plantas que necesiten riego,todo lo más unos cactus enanos, pero como me encantan las flores, he decidido poner en dos tinajas que tengo en la terraza frente al mar esas plantitas pues como son de temporada durarán lo que duren y no tendré problemas de riegos cuando me marche, y mientras tanto disfrutaré de su crecimiento y su color, me harán más agradables los desayunos, ¡En una palabra estoy encantada! mira que es sencillo conseguirlo.
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